Diagnóstico poblacional del cocodrilo americano (Crocodylus acutus) y de tortuga de monte pintada (Rhinoclemmys pulcherrima) en diferentes zonas del Área de Protección de Flora y Fauna Meseta de Cacaxtla y en diferentes zonas adyacentes al Santuario Playa El Verde Camacho. CONANP/PROCODES/6689/2017 y CONANP/PROCODES/6684/2017.
Resumen
En México, el bosque tropical seco y los manglares representan ecosistemas estratégicos e importantes para la conservación de la biodiversidad debido a su riqueza natural y los servicios ambientales que proveen. En estos ambientes, donde la actividad productiva es determinante, se requieren estrategias de conservación in situ orientadas a prevenir la pérdida de hábitat y con ello la pérdida de biodiversidad. Para desarrollar acciones de conservación efectivas, es prioritario conocer la diversidad biológica de estos ecosistemas, así como cuáles son los factores que controlan el funcionamiento y estructura. El uso de especies clave o especies “sombrilla”, usualmente vertebrados carismáticos, ayudan a conservar indirecta y simultáneamente distintas especies con diferentes requerimientos de hábitat. Este es el caso particular de los reptiles, los cuales son sensibles a la perturbación y modificación del hábitat. Mediante el monitoreo de estos organismos, es posible estimar las condiciones y la calidad del hábitat con el fin de establecer estrategias de protección adecuadas y efectivas de las poblaciones dentro de esta área natural protegida y zonas de influencia.
En este contexto, se trabaja con dos especies que por sus requerimientos de hábitat y biología son especies clave que nos ayudan a conservar y mantener los esfuerzos en estas áreas naturales. En primer lugar, el cocodrilo americano (Crocodylus acutus) es la especie más ampliamente distribuida de los cocodrilos de América. Sin embargo, aunque su distribución es amplia se desconoce el estado actual de la mayoría de sus poblaciones y posiblemente muchas de ellas se encuentren disminuidas y aisladas. Esta especie según la Norma Oficial Mexicana (NOM-059-2010) está sujeta a protección especial (Pr) y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN por sus siglas en inglés) la cataloga como Vulnerable. Por otra parte, los quelonios o tortugas, están entre los grupos más amenazados de vertebrados en el mundo. Sin embargo, la tortuga de monte pintada (Rhinoclemmys pulcherrima) no está en ninguna categoría de riesgo en la IUCN, a pesar de que sus principales amenazas, al igual que para la mayoría de los vertebrados terrestres, están relacionadas con la pérdida del hábitat, el tráfico ilegal de especies y el cambio climático. Debido a la insuficiente información disponible para esta especie, se desconoce el estado de las poblaciones existentes particularmente en la porción norte de su distribución que incluye los estados de Sinaloa y Sonora. De acuerdo con la NOM-059-2010 esta especie está en la categoría de Amenazada (A; SEMARNAT, 2010).
Se realizó un estudio poblacional que incluye abundancia relativa y distribución del cocodrilo americano (Crocodylus acutus) y la tortuga de monte pintada (Rhinoclemmys pulcherrima) y se determinaron las áreas de alimentación y anidación para ambas especies con un enfoque participativo e inclusivo de hombres y mujeres mayores de edad de las comunidades locales. Para ello, se realizaron cursos teórico-prácticos y talleres de capacitación para las comunidades de Guillermo Prieto, El Chamizal, El Pozole y Toyhua pertenecientes al APFF Meseta de Cacaxtla y la comunidad El Recreo pertenecientes a zonas adyacentes al Santuario Playa El Verde Camacho. Además, se estableció un protocolo de monitoreo adaptado para las comunidades locales con la finalidad de encontrar, identificar, registrar y monitorear a mediano y largo plazo tortuga de monte pintada y cocodrilo americano, en diferentes zonas del Área de Protección de Flora y Fauna Meseta de Cacaxtla y en diferentes zonas adyacentes al Santuario Playa El Verde Camacho. Con ello se contribuye a promover estrategias de manejo y conservación apropiadas en las comunidades que habitan las Áreas Naturales Protegidas y sus zonas de influencia, y además que los pobladores conozcan y aprovechen sus recursos naturales de forma sustentable para el desarrollo social y económico de sus comunidades.
Colaboración:
Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) mediante el Programa de Conservación para el Desarrollo Sostenible (PROCODES).
